Aunque existen estudios que aseguran que el modafinilo, una droga originalmente empleada en el tratamiento de la apnea del sueño, es capaz de mejorar el raciocinio, son muchos los análisis que cuestionan esta eficacia e incluso advierten sobre graves efectos colaterales.
“Sentía como un timbre en la cabeza, que no me dejaba dormir, y como un resorte en el cuerpo, que me empujaba a hacer hasta las cosas más aburridas sin cansarme. Y para mí, que me quedaba dormida en el trabajo, eso era una maravilla”, señala María Alexandra Cantor a la hora de narrar su experiencia con el modafinilo, droga que le fue recetada durante un tratamiento para paliar la apnea del sueño que padece. “Soy abogada y despreciar esa lotería que me había ganado sin comprarla parecía una tontería. Hoy creo que fue un error muy grave”, concluye.
La droga de la que se sintió víctima, ha ganado mucha popularidad, especialmente entre los estudiantes universitarios, a raíz de sendos estudios a cargo de la Escuela Médica de Harvard y dos investigadoras de la Universidad de Oxford, que demostraron cómo el modafinilo mejora la “toma de decisiones, la solución de problemas y la planificación”, según la publicación de European Neuropsychopharmacology. Desde entonces, las cualidades de esta droga fueron difundidas e incluso promocionados con un inquietante nombre: la píldora de la inteligencia.
Fue desarrollada a finales de la década de 1970, en Francia, por el profesor Michel Jouvet y los laboratorios Lafon. A partir de 1986, comenzó a ser utilizada en tratamientos para la narcolepsia, una patología severa del sueño. Así mismo, Estados Unidos aprobó su uso para el tratamiento de la apnea del sueño, en 1998, y Europa hizo lo propio, en el año 2000. Sin embargo, lo que definitivamente logró disparar la venta de esta píldora (especialmente en el mercado negro) fue el estreno de la película Sin Limites (2011), en donde el uso de una píldora permite al protagonista aprovechar el cien por ciento de su capacidad cerebral.
Sin embargo, otros estudios rigurosos, como el publicado en Journal of Clinical Psychopharmacology, señalan que no existen elementos suficientes para considerar al modafinilo como un potenciador mental. Lo mismo sucede con el análisis realizado por la Universidad Católica de Chile, que afirma rotundamente que “con los datos disponibles, no es posible recomendar el modafinilo como potenciador cognitivo en personas sanas, dada la insuficiente evidencia de su eficacia y la posibilidad de efectos adversos”.
http://co.tuhistory.com/noticias/mitos-y-verdades-acerca-de-la-polemica-pildora-de-la-inteligencia