(Escribe Pablo Villaverde). El Coronel Teófilo Córdoba, durante su mandato como jefe político del departamento de Salto, dejó su impronta. A esta persona se deben grandes obras realizadas en la ciudad, ejemplos principales, la iglesia Nuestra Señora del Carmen, inaugurada en 1855 (luego de que la precaria iglesia de madera y techo de paja se quemara totalmente en un incendio en el año 1846) y el Teatro Larrañaga, inaugurado en 1882.
Volviendo a la primera obra citada, hablaremos de un detalle arquitectónico en el que el Coronel también tiene que ver y que hoy tal vez pasa desapercibido para muchos. Las campanas del reloj de la Iglesia del Carmen.
“LAS CAMPANAS DEL RELOJ
El 17 de octubre de 1890 e silencio de la nueva iglesia de la Plaza Treinta y Tres, cuya construcción se debió en gran parte a la colaboración que obtuvo del Gobierno el Jefe Político Coronel Teófilo Córdoba, cobro vida vibrante al colocársele las campanas que cada cuarto de hora suenan y repiten las horas. Esas campanas fueron obsequiadas por el General Máximo Tajes y fundidas especialmente para dicho reloj. Llevaban las mismas, y suponemos que aun llevan, grabadas en relieve los nombres del donante y el entonces Coronel Córdoba, gran amigo de tajes y persona querida por sus obras civiles y de progreso en Salto.”
Del libro: Crónicas de antaño de Arturo Gagliardi – 1966