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La salud y el dinero

PorDaniel Caiazzo

Feb 26, 2017

(Escribe Dr. Juan Romero). El tema de la salud se ha instalado en la agenda local por el tema del IMAE, desde el planteo ellos  y nosotros (interior Montevideo; norte sur), excluidos incluidos, enfermedad salud, pero no se presenta en el debate el planteo de los intereses. Los cuáles hacen a nuestras acciones cotidianas, desde quenos levantamos hasta que nos acostamos y muchas veces sin reflexionar porque lo tenemos que hacer.

Considerando ello, los intereses en una sociedad altamente permeada por la compra y venta, la
salud no escapa a ello y se antepone en la práctica a los derechos que se mencionan en el discurso.
Entonces el interés por salud se encuentra mediado por el interés monetario, el cual hace posible que las instituciones de salud funcionen, es decir, brinden servicios, paguen salarios y ganancias.
Dicha acción constituye un sistema de salud en el cual los diferentes actores (sean profesionales
de la salud, Estado, sindicatos, asociaciones), se encuentran mediados por dicho interés, cabe
señalar que no es el único, pero en el caso que nos atañe no se lo hace visible en el discurso.
Para tener una breve idea de lo que pretendemos decir, se tomará un ejemplo concreto.
Hace más de 5 años que desde la UDELAR CENUR LN – DCS, se hacen estudios sobre hábitos  y comportamientos saludables, entre los mismos el consumo de alcohol pero también de otros consumos como de opiniones sobre los cuales ahondaremos luego.
El punto es el siguiente, según datos del MSP hay 260.000 uruguayos con problemas de consumo  problemático de alcohol y se sabe que el 37% de los jóvenes consumen en los hogares propios o de los amigos (pregunta: ¿y los padres?).
En el caso de Salto, tales estudios nos indican que la edad de inicio en el consumo de alcohol es  entre los 13 y 15 años (36%), se sabe que cuanto más temprano el inicio más problemas para la
salud en edades posteriores. Estamos diciendo que unos 9.000 jóvenes se han iniciado en tales
edades a consumir alcohol, y de los 25.000 jóvenes que hay en Salto, sabemos que unos 3.000 jóvenes tienen problemas de consumo problemático. Estos muchachos y muchachas salen los fines de semana, manejan vehículos, se imaginó la cantidad de accidentes que debería haber, de
pérdidas de vidas y/o vidas lisiadas y familias destrozadas por estas acciones.
Sin embargo, a nivel local no se hacen campañas para beber menos alcoholy es lógico, es un mercado que mueve unos 50 millones de dólares al año, ahí aparece el interés del dinero y la salud.
Ahora, no todo es tan negativo, el papel de las políticas públicas es revertir estas situaciones o
minimizar el daño que se provoca y sino vea la siguiente noticia: Jóvenes que no consuman
alcohol en “la previa” ingresarán gratis a boliches de Maldonado durante Carnaval” (sitio:
http://www.montevideo.com.uy/contenido/Jovenesquenoconsumanalcoholenlaprevia
ingresarangratisabolichesdeMaldonadoduranteCarnaval335619 acceso el 23/2/17).
Tal acción es llevada adelante por la Junta Nacional de Drogas en coordinación con los
empresarios privados, en este caso, responsables socialmente y en lo personal agrego, empresarios y no empresauros (como en la publicidad de Correos), y también otras instituciones estatales como INAU, Intendencia de Maldonado, Ministerio del Interior y MSP. Le recomiendo leer la noticia es breve pero sustanciosa, se imaginó algo así a nivel local.
Pero, imagine en otro tema de la salud como los problemas cardiovasculares que se haga énfasis
y se invierta en la promoción del deporte, alimentación saludable, visitas preventivas a los
profesionales de la salud, en fin, más en prevenir pero bueno, nuevamente aparece el interés .por  el dinero. Como en el caso del alcohol son muchos los millones de dólares involucrados y no precisamente en la prevención.
En fin, conocer más y mejor dicen los sabios que nos hace más libres, ante lo cual sea como
usuarios o como consumidores de los servicios de salud dicho conocimiento nos hará también
menos pasibles de ser llevados como las olas del mar, especialmente por las corrientes del interés económico, las que no se ven en el oleaje pero lo provocan.