El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente nombró a la joven Nzambi Matee como la Campeona de la Tierra por África en el 2020.
En un pequeño taller de Namibia, en Kenia, una joven de 29 años transforma la basura en una opción más barata, sostenible y hasta más fuerte que el concreto para construir: adoquines de plástico.
Así es el emprendimiento de Nzambi Matee, la joven ingeniera que dejó su empleo en el sector petrolero para fundar su propio proyecto, Gjenge Makers, por el que fue nombrada como la Campeona de la Tierra por África por parte del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP por sus siglas en inglés).
Gracias a este reconocimiento, Matee recibirá fondos y tutorías para continuar y ampliar su emprendimiento.
“Es absurdo que brindar un refugio decente – una necesidad humana básica – siga siendo un problema. El plástico es un material que es mal utilizado y malentendido. Su potencial es enorme, pero después de que cumple su vida útil puede ser un desastre”, indicó Matee a la ONU.
De hecho, Matee advirtió que solo en su ciudad se producen 500 toneladas métricas de residuos plásticos cada día, “y solo una fracción de eso es reciclado”.
“Debemos repensar cómo manufacturamos productos industriales y cómo los utilizamos al final de su vida útil”, indicó Soraya Smaoun, quien se especializa en técnicas de producción industrial con la UNEP.
“La innovación de Matee en el sector de la construcción resalta las oportunidades económicas y ambientales que existen cuando nos movemos de una economía lineal, donde los productos son descartados tras ser usados, a una circular, donde los productos y materiales continúan en el sistema durante todo el tiempo posible”, agregó.
De hecho, hasta el momento la joven empresaria logró reciclar más de 20 toneladas de plástico y convertirlos en adoquines coloridos y también generó 112 oportunidades laborales para clasificadores y mujeres y jóvenes en situación de vulnerabilidad.