Comenzó mayo con una impronta fuerte del Senador Germán Coutinho, quien le solicitó a la Vicepresidente Beatriz Argimón que, cumpliendo con un trámite previsto por el Parlamento, se envíe una minuta de comunicación al Poder Ejecutivo y se cesen los remates e intimaciones de regularización de adeudos de los deudores en unidades reajustables del Banco Hipotecario y la Agencia Nacional de Viviendas, hasta que se cuente con la solución definitiva.
Coutinho expresó que son más de 23.000 familias que contrajeron préstamos en UR con el Banco Hipotecario, reclamando desde hace más de 10 años una solución al aumento desmedido de esta moneda y la repercusión en sus créditos. En la Comisión de Vivienda del Senado de la República existen varios proyectos a estudio, entre los cuales se encuentra el del Senador Coutinho, como también un compromiso cierto y público del Presidente Lacalle Pou, sumado al de los distintos operadores políticos, en dar una solución a estas familias en el menor plazo posible.
El legislador colorado sostiene que aún cuando la solución llegará a la brevedad, un número importante de familias perderían sus viviendas en el transcurso de los trámites. Se reclama que han pagado su casa dos y hasta tres veces, pero existen una serie de colgamentos que les quitan garantías y plazo cierto de cuándo terminarán de pagar su vivienda. En el camino a la solución, se teme que por vía administrativa y con la brevedad de los plazos que conllevan, puedan perder por remate una casa por la que pagaron toda su vida.
Coutinho remarca que hoy no existe una solución para estas familias, además de que por vía administrativa el BHU y la ANV continúan exigiendo el pago de fórmulas impagables, por lo que reclama que el Poder Ejecutivo resuelva detener estas situaciones por un plazo prudencial, hasta que se concrete la solución definitiva, evitando que estos miles de uruguayos se vean rehenes de demoras burocráticas.