No hay plata» se ha convertido en una de las frases más simbólicas del gobierno de Javier Milei, el economista libertario que se ufana de estar llevando a cabo en Argentina un recorte del gasto público sin precedentes.
«No exageramos cuando decimos que hemos hecho el ajuste más grande de la historia de la humanidad», dijo el mandatario el pasado 15 de septiembre, al presentar ante el Congreso su proyecto de ley para el Presupuesto de 2025.
Se trata del primer Presupuesto Nacional que presenta Milei, quien gobierna desde diciembre de 2023.
Este año el Poder Ejecutivo ha utilizado el mismo presupuesto del año anterior, al que le ha ido aumentando ciertas partidas de manera discrecional a través de Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU).
Según la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP), el principal organismo no gubernamental dedicado a este tema, en los primeros ocho meses de 2024 el gobierno redujo el gasto público en un 30,1% interanual, ajustado por inflación: en otras palabras, casi en un tercio.
Güido Rangugni, vicepresidente de ASAP, dijo a BBC Mundo que «el principal aporte a esta reducción fueron las jubilaciones», que representan el mayor gasto del Estado.
«El presidente Javier Milei produjo una drástica reducción del gasto de la Administración Pública Nacional (APN) que no tiene precedentes en la historia económica reciente de nuestro país, orientada a eliminar el déficit fiscal y su financiamiento monetario por medio del Banco Central (BCRA)», señaló la ASAP en un reciente informe.
La premisa de Milei es que, si el Estado Nacional no tiene déficit -es decir, si no tiene más gastos que ingresos, como suele ocurrir-, no tendrá que imprimir dinero para cubrir ese rojo, una emisión que considera la principal causa de que hoy Argentina tenga la inflación más alta del mundo, por encima del 230% interanual.
Para recortar el gasto y mantener un superávit fiscal (más ingresos que egresos), el gobierno ha otorgado este año aumentos presupuestarios por debajo del nivel de inflación.
Según el análisis de ASAP, incrementó el presupuesto menos del 134%, mientras que la inflación promedio del año se estima entre 215% y 224%.
(Fuente: Montevideo Portal)