Desayunos InformalesPrimera mañana
04/10/2024, 10:20
«Si alguien hace su campaña basada en que su virtud es la honestidad, la verdad no me inspira demasiada confianza», afirmó Álvaro Delgado respecto a Yamandú Orsi
Recibimos al candidato del Partido Nacional, quien acusó a la oposición de «falta de honestidad intelectual».
Faltan poco más de tres semanas para las elecciones nacionales y ya entramos en la recta final de la campaña. La fórmula del Partido Nacional, integrada por Álvaro Delgado y Valeria Ripoll, continúa con su gira por todo el país, mientras las últimas encuestas muestran una caída de los blancos en favor de los colorados.
No siento que la oposición sea mi enemigo, son adversarios. Y adversarios donde vos tratas de insistir o ser más contundente en el debate de ideas en la campaña electoral, pero muy consciente de que al otro día de la elección vos gobernás no para los que te votaron, sino que gobernás para todos los uruguayos y tenés que tenderle la mano a todos los partidos políticos.
Si alguien hace su campaña basada en que su virtud es la honestidad, la verdad no me inspira demasiada confianza. Porque la honestidad no es un diferencial, la honestidad política menos es un diferencial. Pero la honestidad como valor, como atributo, no es un diferencial, no es una virtud. La honestidad es una condición necesaria para hacer política, para ser presidente, legislador, periodista, para ser empresario, para ser sindicalista.
Ayer el propio designado aspirante a ministro de Economía del Frente Amplio reconoció su condicionamiento político. Acá no hay dos equipos económicos en el Partido Nacional, ni en la coalición, hay uno solo. Y hay un solo lineamiento económico.Hoy tenemos menos de la mitad de la inflación que el 2019, tenemos récord de personas trabajando, récord de masa salarial. Tenemos el salario real más grande en 49 años. Tenemos récord de inversiones respecto al 2019. Ese equipo económico es al cual yo le voy a confiar el próximo destino. El tema no es Oddone. A Oddone lo condiciona un partido político que no tiene una misma línea económica que él. Que tiene una interna que lo condiciona.