Con la nueva herramienta impulsada por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), denominada SiGa Ambiente, se busca facilitar el financiamiento de sectores o inversiones que contribuyan a una producción ambientalmente más sostenible. El instrumento contempla una reducción del 50% en la comisión cobrada por el uso de la garantía del Sistema Nacional de Garantías para Empresas (SiGa).
La herramienta SiGa Ambiente, desarrollada de forma conjunta por el MEF, el Ministerio de Ambiente y la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE), “nace del entendimiento de que las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) tienen un papel esencial en la promoción del desarrollo sostenible”, se explica en el comunicado divulgado por Economía este jueves 17. También se establece que el sistema financiero puede promover la innovación y el desarrollo de nuevos modelos de negocio, mediante el otorgamiento de condiciones preferenciales de financiación a dichas compañías.
El SiGa está conformado por líneas de garantía destinadas a asegurar hasta el 70% de los créditos a las mipymes que no dispongan de ellas. Según el MEF, ese elemento brindará a las empresas la posibilidad de acceder a créditos en condiciones más favorables.
Además, promueve el financiamiento de sectores o inversiones que contribuyan a una producción más sostenible con el ambiente. Para ello, se contempla una reducción del 50% de la comisión cobrada por el uso de la garantía del SiGa, informó la cartera. El instrumento está dirigido a las empresas del sector de gestión de residuos y a aquellas que realicen inversiones que contribuyan a una producción más sostenible.
La nueva herramienta se suma a otras acciones implementadas por el MEF para integrar la acción climática y la conservación de la biodiversidad a la política económica. Entre ellas, se destaca la incorporación de los compromisos climáticos de Uruguay ante el Acuerdo de París a la estrategia de endeudamiento soberano, mediante instrumentos financieros como el Bono Indexado a Indicadores de Cambio Climático y la suscripción de un préstamo soberano sostenible con el Banco Mundial, entre otras.