(Escribe Prof. Regino López). Para muchos parece que fue ayer que se fundó el Frente Amplio. Seguramente
los más veteranos cierran sus ojos y ven ese maravilloso momento en que
cristianos y marxistas, hombres de avanzada de los partidos colorado y
nacional y miles de uruguayos luego de muchas idas y venidas, concretaban
el sueño de la unidad. Unidad sin exclusiones, donde todos aquellos que
entendían que era necesario caminar hacia un proyecto popular y democrático
encontraron su espacio y hoy nos encuentra a nosotros.
Desde su misma fundación nuestro Frente Amplio no paró de crecer; de
desarrollarse; de adaptarse a los nuevos tiempos y de tejer acuerdos
programáticos que permitieran acceder al gobierno y cambiar la realidad en
favor de los que menos tienen y junto a ellos. Buscando siempre la concreción
de aquella máxima de José Artigas: “que los más infelices sean los más
privilegiados.”
El crecimiento del Frente Amplio, su llegada al gobierno y su sostén, ha sido, es
y será, gracias a los Comités de Base y a la militancia. El comité es el espacio
natural de encuentro, donde nos convocamos a la discusión fraterna y al
intercambio, que luego nos permite llegar al vecino; defender nuestro gobierno,
mostrar los logros y marcar los errores. Esto es único, solo el Frente Amplio lo
puede hacer; es innato a nosotros y tenemos que defenderlo de todas las
maneras.
La militancia desinteresada es el otro puntal. En todos los lugares tenemos
comités y en ellos nos encontramos con compañeros que desinteresadamente
dejan horas de su vida, defendiendo nuestro programa, los logros, las metas y
marcando el camino a través del aporte continuo .
En este momento tan especial; donde nos encontramos a festejar un
aniversario más; vaya el destacado saludo a cada militante, a cada compañero;
a cada uno de aquellos que con su sacrificio militante ha contribuido para que
sigamos en el gobierno; pero con esto no basta. Estamos ante una fuerte
embestida de la derecha y tenemos que estar preparados. Hay que mantener
llenos los Comités; hay que reunirse; discutir y marcar el camino; esa es la gran
salida y la garantía para seguir gobernando.
La discrepancia es natural; las diferencias son necesarias, pero la discusión es
adentro. En cada espacio que nuestro Frente Amplio tiene, tenemos la
obligación de encontrarnos, discutir y acordar para salir juntos a la calle a
defender lo logrado; profundizarlo y encaminarnos hacia más y más logros.
¡¡¡Viva el Frente Amplio!!!