Denuncias de desmontes con destinos inciertos, desmontes destinados a una iglesia de lo que se desconoce paradero, pedregullo con sentido puesto en captación de votos que hacen de un paseo de todos los salteños en una realidad: Parque del Lago es tierra de nadie.
A lo antes dicho la utilización de uno de los padrones donde se visualiza ganado del que no se sabe origen.
Una importante área del parque, con plantación de pinos, se le permitió desmontarlo con destino a construir una edificación destinada a atender a jóvenes con consumo problemático de sustancias. Construcción que nunca se hizo efectiva y que generó el desconocimiento del paradero de dicha madera. Más grave aún, la iglesia a la que se le permitió el desmonte estaría relacionada con la esposa del intendente.
La salida de todo lo que se mueve hacia el afuera de Parque del Lago, se hace sin guía, sin control lo que amerita una investigación exhaustiva.
En la misma línea, se informó a este medio la existencia de auditorías internas que no habrían prosperado por decisión de los altos mandos.
Alguien debería suspender cualquier movimiento en un bien tan preciado de todos los salteños y actuar en consecuencia.