Las mejoras en el monitoreo de cantidad y calidad de agua y el fortalecimiento del sistema de alerta temprana por inundaciones y sequías fueron algunos de los resultados presentados del proyecto liderado por el Ministerio de Ambiente Adaptación en Acción, ejecutado en la cuenca del río Santa Lucía. “Es tangible, deja instalaciones, estaciones telemétricas y software de modelaje”, afirmó el ministro de Ambiente, Robert Bouvier.
La presentación de los resultados del proyecto se efectuó este lunes 8, en Torre Ejecutiva. La mesa de apertura estuvo a cargo, además de Bouvier, de la directora nacional de Aguas, Viviana Pesce; el embajador de España y representante de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid), Santiago Jiménez; el jefe de Cooperación de la Embajada de Unión Europea, Markus Hanke, y la gerenta de Cooperación de la Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional (AUCI), Claudia Romano.
El proyecto “Tecnología y modelación para la gestión integrada de las aguas como adaptación al cambio climático de la principal fuente de agua potable de Uruguay” fue desarrollado por el Ministerio de Ambiente en la Cuenca del Río Santa Lucía, con la colaboración del gobierno de España, la Unión Europea y AUCI.
Bouvier destacó que a través de la iniciativa se instaló una sala de situación en la sede de la Dirección Nacional de Aguas (Dinagua) para monitorear la cuenca en forma permanente. “Este proyecto es tangible, deja instalaciones, estaciones telemétricas y software de modelaje”, precisó.
En ese contexto, subrayó que el proyecto se basa en tecnología y capacidades que consideró fundamentales para el cuidado de la cuenca del río Santa Lucía, donde luego del déficit hídrico se enfatizó en la implementación de alertas meteorológicas.
Entre los principales resultados, Bouvier resaltó la adquisición e instalación de equipos de monitoreo de cantidad y calidad del agua de la cuenca del río Santa Lucía y el abastecimiento de dispositivos y herramientas de modelación que aportan nuevos datos a la sala de situación y pronóstico.
También subrayó los avances en el desarrollo de modelos hidrológicos y en la evaluación de escenarios para la planificación hídrica y el fortalecimiento del sistema de alerta temprana por inundaciones y sequias.
Asimismo, destacó el desarrollo de dos proyectos piloto: uno de perímetros de protección de pozos de abastecimiento de agua potable; y otro de monitoreo participativo hidrometeorológico, ambos con el involucramiento de la comunidad local y particularmente de centros educativos. “Es imposible que nuestro ministerio pueda establecer políticas a largo plazo si no tiene el involucramiento de la sociedad”, indicó.
Pesce, por su parte, sostuvo que el proyecto aportó avances en tecnología para el uso del agua. Explicó que personal técnico trabajó en los sistemas para realizar predicciones. “Estas herramientas nos han permitido trabajar con Inumet y otros organismos en las alertas tempranas”, explicó.
Romano, en tanto, consideró que la iniciativa permite generar capacidades y recabar datos, para resolver a partir de esa información. También valoró el desarrollo de modelos que permiten las predicciones y el trabajo con las nuevas generaciones en favor de sensibilizar sobre nuevas realidades en el país.
“La cooperación sirve para catalizar un cambio para poder agregarle un valor a una política pública”, señaló. Agregó que eso tiene sentido si logra provocar algunas modificaciones que permitan incidir en las poblaciones y en la realidad.