En tanto, el 6% de los uruguayos afirma que votará en blanco o anulado, y 8% está indeciso, según la encuesta de Equipos Consultores entre el 2 y el 11 noviembreAl comenzar noviembre, la preferencia de los uruguayos hacia la segunda vuelta del próximo domingo 24 muestra una situación competitiva, con Yamandú Orsi recibiendo el 45% de las adhesiones, contra el 41% de Álvaro Delgado. 6% de los uruguayos afirma que votarán en blanco o anulado, y 8% está indeciso.
Estos resultados son provenientes de una encuesta realizada por Equipos Consultores entre el 2 y el 11 de noviembre a 1.000 uruguayos mayores de 18 años residentes en todo el territorio nacional. La encuesta fue realizada a través de teléfonos celulares. El margen de error máximo estimado para estas estimaciones es del entorno de 3,1% en más y en menos, para un intervalo de confianza del 95%.El resultado actual es producto de movimientos múltiples. Como era de esperarse, la enorme mayoría de quienes votaron al FA en primera vuelta se inclinan hoy por Orsi, y la enorme mayoría de quienes votaron al PN lo hacen por Delgado. En ambos casos hay 2% de votantes de primera vuelta que están indecisos sobre qué hacer en la segunda vuelta.En el electorado del Partido Colorado la retención de la Coalición es alta, pero hay una pequeña migración hacia Yamandú Orsi, y un grupo de indefinidos. Del 16% de votantes colorados de la primera vuelta, 12% votaría a Delgado en la segunda vuelta, y 1% votaría a Orsi. Además, hay también 1% que dice que va a votar en blanco o nulo, y 2% está indeciso.
Dentro de los restantes partidos de la Coalición (Cabildo Abierto, Partido Independiente y Partido Constitucional Ambientalista), que acumularon 4% en la primera vuelta, no hay migraciones significativas hacia Orsi, pero tampoco retención absoluta de Delgado. Si la elección fuera hoy, 2% votaría a Delgado, 1% en blanco o nulo, y 1% está indeciso.
En los restantes partidos del sistema, que acumulan 4% pero donde predominan los votantes de Identidad Soberana, la fragmentación es muy alta, entre los que votan a cada uno de los candidatos, la indecisión y el voto blanco o nulo.
Finalmente, entre los que votaron blanco o nulo en la primera vuelta (5%), la mayoría (3%) repetiría ese comportamiento, pero hay también flujos de 1% hacia ambos candidatos.
Indecisos y no decididos
La diferencia entre Orsi y Delgado es de 4 puntos, y aún hay 8% de electores indecisos. Pero, además, hay un grupo importante de los que se inclinan por algún candidato, que hoy “no están totalmente decididos”.
Del 45% que hoy votaría a Orsi, en realidad 41% está “completamente decidido” y 4% podría llegar a cambiar su voto. Del 41% que elige a Delgado, 38% está “completamente decidido” y 3% no lo está. Por tanto, además de los indecisos totales del sistema (8%), hay 10% adicional de votantes que hoy prefieren una opción, pero podrían llegar a revisar su decisión .En balance
En el punto de partida, Orsi tiene alguna ventaja sobre Delgado, pero:
a) esta diferencia, bien mirada, está dentro del margen de error de la medición, que es de 3% en más y en menos para cada uno de los candidatos;
b) pequeñas variaciones en cada uno de los segmentos analizados podrían tener consecuencias importantes, ya que algunos movimientos aquí “valen doble”. Vale decir, si Delgado logra mover apenas a un 1% de los orientados a votar a Orsi a su favor, la diferencia se achica en 2 puntos. Por tanto, una diferencia de 4 puntos como la actual puede ser mucho más pequeña de lo que parece a primera vista;
c) entre los actuales indecisos, hay más votantes que votaron partidos de la Coalición en primera vuelta (5%) que del Frente Amplio (2%). Si ambos bloques fueran igualmente exitosos en retener estos electores, la diferencia entre los candidatos se podría acortar. Esta puja por la “retención” o “migración” de los votantes de la Coalición es una de las claves de la elección.
d) Si se suman los “indecisos” (8%) y los que tienen preferencia por candidato, pero “no están totalmente decididos” (7%), se concluye que nada menos que 15% del electorado aún no se considera en terreno firme.
Por tanto, estos resultados deben considerarse apenas como la primera “foto” de una campaña a la que aún le falta el tramo decisivo. Equipos continuará monitoreando el estado de las preferencias, y compartiendo los resultados la próxima semana.
