Ha sido un domingo intenso en materia informativa. Detenciones, aclaración del caso de los últimos días, allanamientos, respuestas, conocimientos de responsabilidades y firmeza. Desde lo policial. Desde lo político…………..nada nuevo bajo el sol.
El viernes anunciamos el cese de la directora de turismo, responsable material que el dinero quedara donde quedara y que pasara lo que pasara.
Vimos con asombro un medio que «operaba para la derecha» como muchos acusaron desde el discurso tribunero, que hoy (domingo) salió a defender lo indefendible en nota firmaba de la que puede sospecharse su autor intelectual. Medio en el cual hoy aquellos detractores de ese medio son columnistas destacados (¿y nosotros somos panqueques?)
Un diario, de escaso tiraje, mencionó que sería desestabilizador hablar de ceses cuando en el 2016 entre ceses y renuncias al menos siete u ocho cargos cambiaron y no dijo lo mismo.
Habló de que no hay un cese firmado, es verdad, enteramente firmado no, falta una firma que cualquier inteligente debe saber a quien responde.
Pero lo que es más llamativo, habla de dos jerarquías, Chiriff y Rodríguez, como foco de la discusión cuando en realidad quien «realmente» eso escribió, desvío con suprema pluma a cuenta de otra firma, la atención de lo grave.
Lo grave es que no se puede «chantajear» a cuentas de intereses propios, gritar que si «mi compañera se va yo también» porque primero, es poco creíble, y segundo es berrinche inmaduro de quienes en situaciones como estas dejan al desnudo los intereses mezquinos del poder momentáneo, al bien común y a largo plazo.
Quien eso escribió, a cuenta de otra firma, no cuenta en su relato la firmeza que tuvo para sacarse de encima a discutidores y denunciantes de la falta de gestión en la que si se ve involucrado.
Tampoco cuenta que quizás…..y solo quizás, haya sido una conversación de sábanas en estos términos: «dejo la plata o no?». Y la respuesta haya sido: «dejala, nadie sabe, yo te banco». Como tantas sábanas que visitó y visita…..
Tampoco cierra que hayan existido rondas de contactos para interceder en el pedido de renuncia de la directora de turismo. Si asume responsabilidad, pide renuncia y si eso no sale en las primeras 48 horas del robo, viene el cese.
Está jodido haber dilatado tanto el tema, viendo que la policía armó un operativo que fue noticia a nivel nacional, pero políticamente el intendente no tuvo los «mismos cojones» para resolver.
Este medio se ha «bancado» todas y lo sigue haciendo, lo que no se va a bancar es la mentira institucional sistemática.
Escondiendo delitos, protegiendo, ocultando, barriendo abajo de la alfombra y cuidando la billetera por sobre todas las cosas, no se desmiente a Quinto Elemento, se desmiente a la gente que alguna vez puso un voto de confianza y que ve con asombro que existen dos mundos paralelos……
El real y el de Lima.